Era una tarde en algún bar de Santiago, tomando unas cervezas y sus cigarros Hilton...está muy caro el vicio... harta gente, una pareja sentada al lado de nosotros: Él tratando de tocarla y de besarla, Ella iba vestida con unos pantalones cortos, mostraba sus piernas...era sugerente y sexy.
Esta fue la movida:
Ella lo llevo por el lado del amigo, al principio solo bromeaban y cuando El se le acercaba ésta no dejaba tocarse y le daba unas palmadas en el hombro, aparte de unas risas sin sentido. Así supo mantener la marejada...hasta que El ya no se le acercaba mucho, sin embargo, Ella se dió cuenta y con unos vasos demás empezaba a acercar su cara. Quien sabe si El se daba cuenta, pero era el momento.
Un rato más y Ella fue al baño...al volver El se levanta y también lo hace. PERO, el detalle es que ahora se sentó justo al lado de Ella y comenzaron con el jugo de muelas. En fin...
"... Hubo una vez en que Palermo estaba lesionado, y le dijo al que lo iba a reemplazar (no recuerdo su nombre): Mira, de todas las pelotas te va a llegar una, ésa es la que tienes que meter...pueden haber miles de pelotas perdidas, pero esa que llegue a tus pies tienes que meterla sí o sí...
y el compadre metió el gol..."
Frase de un amigo...no recuerdo bien las palabras...
Así con la filosofía de Palermo...
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